¿CÓMO SE COME EL AJO NEGRO?

El ajo negro se puede comer solo, en tostadas, ensaladas, verduras crudas o cocidas, todo tipo de carnes, pastas, legumbres, etc.

VALOR CULINARIO

El ajo negro posee una textura y sabor, peculiar y único.

Cuando se prueba por primera vez, la reacción generalizada es de sorpresa, nadie puede imaginarse que un ajo se transforme de tal manera.

Matices de ajo horneado, regaliz, frutas silvestres confitadas, recuerdos de azúcar caramelizada y hasta alguna nota a salsa de soja, le confieren un sabor inigualable y sorprendente.

A la hora de incorporarlo a la cocina, no debemos cometer el error de agregarle uno o varios dientes, a cualquier comida. De la misma manera que no le agregamos ajos convencionales a cualquier receta, ni cualquier otro condimento, por mucho que nos pueda agradar. Es necesario encontrarle el maridaje adecuado.

Sin olvidar nunca, que EL AJO NEGRO PIERDE PARTE DE SUS PROPIEDADES NUTRICIONALES SI SE COCINA MUCHO TIEMPO.

 EL AJO NEGRO EN LA RESTAURACION

El ajo negro esta incorporado en la dieta cotidiana, en muchas regiones orientales. En países como Japón, Corea, Indonesia o China (que se disputan su descubrimiento) su valor nutricional y culinario es muy apreciado, esta incorporado a su dieta habitual y son los mayores consumidores del mundo.

La incorporación de este producto en el mercado americano y europeo es muy reciente, y su consumo no alcanza aun volúmenes significativos. A pesar de lo cual, un gran numero de los mejores chef del mundo, lo están incorporando a sus cartas y degustaciones. En España, no son pocos los cocineros de máximo prestigio internacional, que están elaborando exquisitos platos, que incorporan el ajo negro, Ferran Adriá, David Muñoz, Karlos Arguiñano.